Jair Bolsonaro manifestó estar en desacuerdo con el aislamiento de la población para evitar la propagación del coronavirus. "Las personas no pueden quedarse en sus casas, tienen que salir a buscar su sustento", afirmó el mandatario. A su vez, cuestionó a gobernadores que decretaron el cierre de comercios.
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En Brasil, la epidemia infectó a 621 personas y causó la muerte de siete. No es la primera vez que el presidente de Brasil se manifiesta en contra de las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud. Él mismo rompió la cuarentena que le había sido impuesta después de viajar.
"Nosotros esperamos, creemos, que en tres o cuatro meses va a disminuir el pico del virus y a partir de seis meses Brasil entra en la normalidad", comentó.