Este jueves por la mañana, tres delincuentes vestidos como empleados del correo, se apersonaron en una vivienda de Mariano Comas 3300, en el macrocentro de la ciudad de Santa Fe.

Con la excusa de entregar una encomienda lograron que la empleada de la casa les abra la puerta y allí aprovecharon para reducirla e ingresar a la casa con fines delictivos.

Dentro de la vivienda se encontraban cuatro menores, entre 12 y 17 años, hijos de los dueños de la casa.

"Nosotros estábamos durmiendo y nos hicieron bajar a todos. Uno de mis hermanos quedó durmiendo arriba, nos pidieron los celulares y querían plata. Nos pedían que nos sentemos y que le digamos dónde estaba el disco de la cámara para destruirlo" declaró una de las jóvenes al medio ADSF.

Los ladrones se llevaron objetos de valor y los registros de las cámaras de seguridad. La policía inició la búsqueda de una Toyota de color gris con vidrios polarizados que, según los vecinos, vieron huir a toda velocidad del lugar.