En la madrugada del 25 de diciembre, una bala perdida traspasó el techo de la casa de un vecino de Santo Tomé. Afortunadamente no hubo heridos.

 

 

Un hecho que pudo haber terminado el tragedia. Durante los festejos navideños, una familia de Santo Tomé escuchó un fuerte ruido que les llamó la atención.

No se trataba de pirotecnia: una bala había atravesado el techo de la casa, sin herir a nadie por fortuna.

Los dueños de la morada no salían de su asombro pero agradecieron no haber sufrido consecuencias.