Como se preveía, finalmente ayer obtuvo media sanción de Senadores, el proyecto presupuestario 2020. En un recinto cargado de tensiones, y contando con el aval de seis legisladores del justicialismo, el socialismo obtuvo el quórum necesario para el tratamiento y su posterior aprobación, del proyecto macro económico del año próximo, aprobado sobre tablas y de manera express.
Luego de negociaciones y estrategias políticas, el próximo gobernador de la provincia, Omar Perotti, no pudo evitar que el proyecto presupuestario se gire a diputados para ser tratado la semana próxima. A libro cerrado, los legisladores aprobaron el cálculo de gastos para el año siguiente sin ninguna modificación.
A pesar del intento de Perotti, quien designó a su vice gobernadora, Alejandra Rodenas, para pactar con los senadores que fuesen ellos mismos quienes elaborasen el presupuesto, el acuerdo no pudo concretarse y finalmente se aprobó aquel que inicialmente fuera remitido por el ejecutivo.
En verdad, el proyecto presupuestario aprobado por la cámara alta, es, en rigor, una caja de pandora, ya que su aprobación fue dictada sin discusión ni tampoco ninguna modificación. Según pudo saberse, los guarismos del año próximo, que tuvieron el consentimiento de los legisladores, tiene, en parte, como objeto, sanear el déficit de este año, ya que está estipulado, entre otros, la designación de 3 mil millones en partidas presupuestarias para cubrir el déficit en el sector salud de la ciudad de Rosario del actual período en vigencia.
Perotti, que tuvo su foto con todo el justicialismo a su espalda, deberá negociar y dar de nuevo, ante un bloque que se vislumbra dividido, pero ahora, con las riendas del ejecutivo al mando.