La crisis llevó a que los argentinos consuman menos carne. Según datos de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes y Derivados, se consumen seis kilos menos de carne.

 

La baja en el consumo se relaciona con la pérdida del poder adquisitivo en algunos trabajadores. Y por el precio del producto, que aumentó al mismo tiempo que la inflación.

Al contrastar septiembre de 2019 con septiembre del año pasado, el precio promedio de la hacienda experimentó un alza de 46,5%

Por su parte, las carnes alternativas registraron alzas de precios sustancialmente superiores (12,4% en el caso del pollo y 14,0% en el caso de los cortes porcinos). La exportación, por otra parte, continúa en ascenso. Según el informe de Ciccra, por el crecimiento del mercado chino y la consecuente demanda externa, la faena durante el mes de septiembre fue de 1,2 millón de cabezas, lo que registra un aumento del 16,7% en relación al año pasado, informa el sitio crónica.com.