Su abogado dijo que existe expectativa de que la Cámara rechace el procesamiento.

“Estamos próximos a las elecciones y tenemos otro desembarco espectacular en la zona”, se indignó el abogado defensor Javier Rabadé en relación a la causa que se le sigue al empresario portuario y dirigente gremial, Herme Juárez. Acusado de liderar una asociación ilícita, administración fraudulenta y lavado de activos. Para el letrado los allanamientos realizados el martes último en bancos de Rosario y San Lorenzo para investigar cajas de seguridad, son parte del mismo “circo” que originó la causa para acusar a Juárez. Y emparentarlo con el accionar de otros gremialistas a los que se le demostraron delitos económicos.

“Son muy coincidentes los golpes de escena con los tiempos políticos”, consideró. Y agregó que “ésta es una causa que nació en un momento político determinado y se está desinflando de acuerdo a los tiempos políticos que corren. No tiene sustento ni asidero de ningún tipo para demostrar los delitos que se endilgan”. Luego aseguró que Juárez “no es el sindicalista millonario del que todos hablaron cuando lo detuvieron”.

Argumentos

“En cada punto en el que nos ponemos a rebatir una prueba, ésta se cae como un castillo de naipes”, contó. Y se esperanzó: “Existen grandes expectativas de que la Sala 2 de la Cámara Federal de Apelaciones rechace el procesamiento. Apuntamos a que caiga la causa y a un sobreseimiento por inexistencia de delitos”.

“Bajo ningún concepto hay delitos en este expediente. Recordemos que todo se originó por una acusación por narcotráfico. Y luego derivó en una persecución por delitos económicos que tampoco prosperará. Entre muchos documentos, en la causa hay hasta declaraciones de gerentes de bancos, informes de empresas y de la Afip. Y ahora fueron, con un nuevo montaje espectacular, a allanar locales en San Lorenzo y Puerto San Martín. Cuando pudieron haber realizado esas diligencias con absoluta tranquilidad, como se hace en todos los casos”, dijo molesto el letrado.

Leer más: Allanamientos en bancos de Rosario y San Lorenzo por la causa Herme Juárez

“La instrucción es muy desprolija. Nada da con nada. Algunos datos de la cajas estaban cruzados. Herme no tiene cajas de seguridad, la Afip habla de dólares, el banco de pesos. Y la acusación sobre él no termina de cerrar nunca”, se ofuscó Rabadé. Remarcó que “la causa se está pinchando y él no es el millonario que todos decían. Juárez no es el sindicalista de los cien millones ni mucho menos”.

Defensa

El abogado dijo que el equipo de defensores continúa trabajando para fundamentar ante la Cámara de Apelaciones el pedido de nulidad sobre el procesamiento del líder sindical. “Apuntamos a la cuestión formal, en la que resulta muy burda la nulidad por la ausencia de requerimiento fiscal y objetando las acusaciones sobre los delitos planteados en particular”, dijo y detalló que “la figura de asociación ilícita no existe. Tampoco la de amenaza coactiva; no tiene sustento porque en los 21 cuerpos que actualmente tiene la causa no figura que los amenazados se sientan como tales ni declararon en ningún momento”.

“Tampoco se sostiene la acusación de lavado de dinero agravado por la habitualidad. Presentamos un gran cúmulo de pruebas para demostrar los movimientos. Incluso acreditamos de punta a punta el incremento patrimonial de Herme, incluido el año 2016 en el que se evidencia el mayor crecimiento y está relacionado a las ventas de cabezas de ganado realizadas durante ese año”, explicó.

En el mismo sentido dijo que “no hay evidencia en el expediente de administración fraudulenta ni de desvío personal ni con su círculo íntimo de la Cooperativa hacia Herme Juárez y mucho menos del Sindicato Unidos Portuarios Argentinos (Supa)”.

Libertad   

Poco después de las 17.30 del miércoles , cuando la defensa de la familia Juárez se disponía a fundamentar su pedido de excarcelación ante la sala 2 de la Cámara Federal de Apelaciones de San Martín en Buenos Aires, el juez federal de Campana, Adrián González Charvay, dispuso sorpresivamente la libertad de Oscar Juárez, hijo del dirigente gremial y empresario Herme Juárez, detenido el 1º de agosto pasado acusado de liberar una asociación ilícita, por lavado de dinero y extorsión. La medida asombró incluso porque el magistrado obró de oficio y 20 días antes había rechazado un pedido de excarcelación de los defensores.

“Mientras tramitábamos la presentación de los fundamentos de nuestro pedido el juez tomó la decisión de excarcelar porque entendió que ya se realizaron todas las medidas de prueba y que no hay posibilidades de que el acusado entorpezca la causa ni eluda el accionar de la Justicia”, explicó el abogado Rabadé a este diario. Según indicó el letrado, la situación procesal de Oscar es la misma que la de su padre, sólo que a Herme lo acusan de ser el jefe de una asociación ilícita y a su hijo como miembro de esa presunta organización, al igual que Daniel Badía, Damián y Pablo Bunello, Hernán López y el abogado Ramón Jerez, dirigentes de la Cooperativa de Trabajos Portuarios de Puerto San Martín.

Leer más: Herme Juárez ya cumple prisión domiciliaria en San Lorenzo

“A pesar de que se les imputaban los mismos delitos todos recuperaron la libertad al poco tiempo, pero Oscar quedó detenido por portación de apellido”, se ofuscó Rabadé y precisó que “se dispusieron algunas restricciones a la libertad de Juárez hijo como la obligación de presentarse todos los primeros lunes de cada mes en sede judicial e informar al juez si se ausenta de su domicilio por más de 24 horas o se muda”.

Para el abogado el juez se adelanta a tomar una decisión porque “era un escándalo que esté detenido. Tenía la misma calificación legal que la gente que está en libertad simplemente por el agravante de portar el apellido”.

El defensor también se quejó del accionar de la Justicia respecto al bloqueo sobre la clave única de identificación tributaria (Cuit) de Herme Juárez. “Hay un gran número de trabajadores que dependen de empresas que él dirige y esa inhibición se traduce en un impacto muy negativo para esos empleados”.