Un reciente análisis de costos y precios de los medicamentos producidos por el Laboratorio Industrial Farmacéutico (LIF), solo durante los años 2016 2017 y 2018, arrojó un ahorro de 55 millones de dólares para la provincia. Esa cifra, que supera el valor de la construcción del Nuevo Hospital Iturraspe (U$ D 48 millones), surge de lo que debería haber invertido el Estado si hubiera adquirido la misma cantidad de fármacos en el mercado farmacéutico privado.

Desde 2008 a la fecha, la soberanía sanitaria y eficiencia han sido pilares fundamentales del plan de modernización del LIF. En este período se dieron los mayores avances en la producción pública de medicamentos, cuyos frutos se han incrementado año a año a partir de la multiplicación de las capacidades tecnológicas, el avance en materia de recursos humanos, organización, logística y un ambicioso avance de la infraestructura existente. Estas mejoras en conjunto son el resultado del trabajo realizado por el Ministerio de Salud a través de la producción de fármacos del LIF, no solo garantizar el acceso a los medicamentos a todos los santafesinos.

“La primera meta de nuestro sistema público de salud provincial es garantizar los derechos sanitarios de la población, es una decisión política que va más allá de una mera mirada contable. Ahora bien, una meta subsidiaria de cada uno de los actores que componen el sistema, como el laboratorio, son las mejoras de gestión que hacen a la sostenibilidad y avances sanitarios públicos en el tiempo, y esto es palpable a la hora del análisis de los costos y precios de los medicamentos producidos por el Estado en los últimos años”, destacaron desde el directorio de LIF SE.

“Hicimos un estudio retrospectivo sobre los costos de producción considerando los costos directos y los fijos totales de la producción del LIF en 2016 2017 y 2018. Los resultados obtenidos en esos tres años indican un ahorro de al menos 55 millones de dólares para el Ministerio de Salud de la provincia. Ese monto surge de la diferencia entre los costos de producción del LIF y el precio mínimo —a valores de mercado—, que el Estado provincial debería haber abonado para adquirir la misma cantidad de medicamentos elaborados por el LIF en el sector privado”, manifestaron los funcionarios del laboratorio.

Debe tenerse en cuenta a la hora de las evaluaciones en este sentido, que el precio oficial de los medicamentos en la Argentina y que sirve de referencia para esta evaluación del LIF entre 2016 y 2018, es aquel que figura en el Manual Farmacéutico: el monto que pagaría cualquier ciudadano en una farmacia, 100% en efectivo, sin los descuentos de una obra social.

“La información surgida de estos análisis de gestión permite tomar decisiones estratégicas que favorecen la competitividad de la organización, del laboratorio en su conjunto, para orientar la producción hacia la satisfacción de las necesidades requeridas, pero que paralelamente representan una conveniencia desde el punto de vista de la eficiencia del gasto“, indicaron.