Cinco jugadores de rugby del club Gimnasia y Esgrima de Rosario deberán pagarles 600 mil pesos a tres jóvenes a quienes golpearon e hirieron a la salida de un boliche de la costa central de la ciudad.

Así lo acordaron ayer en sede judicial, donde accedieron a una probation a raíz de la cual deberán dictar clases de rugby en tres cárceles santafesinas dos horas semanales durante dos años y no acercarse a las víctimas.

La justicia también les impuso abstenerse de abusar de la ingesta de bebidas alcohólicas y de consumir estupefacientes.

La pelea que los tuvo en el centro de esta causa judicial estaba caratulada como lesiones dolosas y se desató la madrugada del 5 de noviembre de 2017 en el boliche bailable "Wallas", ubicado a metros de la explanada del parque España.

Una de las cuatro víctimas del ataque, entre las que figura un personal de seguridad del boliche, debió ser intervenida quirúrgicamente a raíz de las lesiones sufridas.

El acuerdo, que le fue propuesto al juez penal José Luis Suárez por la fiscal Cecilia Brindisi con el aval de la defensa de los rugbiers, determinó que a dos de las víctimas se las deberá reparar económicamente con 400 mil pesos, al tiempo que a las otras dos se las deberá indemnizar con 210 mil pesos.

Denuncia

La denuncia contra los cinco rugbiers había indicado que la madrugada del ataque estaban en el acceso al sector VIP del boliche cuando un grupo intentó acceder a ese sitio a los golpes.

Según la mecánica del hecho que se pudo reconstruir a través testimoniales de las víctimas, clientes y registros fílmicos, el grupo comenzó a ocasionar disturbios, en medio de los cuales agredieron a golpes a otros jóvenes que estaban dentro del local.

En ese momento intervino personal de seguridad del lugar para separar y tranquilizar la situación, procurando sacarlos del boliche para evitar más incidentes.

Ya en la vereda, dos empleados del boliche fueron agredidos nuevamente. Un custodio recibió un golpe en la nariz que le provocó una fractura y una patada en la pierna que derivó en una fractura de tibia y peroné.

Otro personal de seguridad recibió un tremendo golpe en el rostro que le generó hundimiento de encías, desplazamiento dental y fractura maxilofacial.

Los rugbiers se retiraron del lugar por Sarmiento, pero después de segundos regresaron, amenazaron a otro custodio y lesionaron a una persona que trabaja en el área de relaciones públicas del boliche.

Tres de las víctimas debieron ser asistidas en el Sanatorio Británico y el hecho fue denunciado oficialmente en la comisaría 3º. Ahora, deberán indemnizarlas por las lesiones que les ocasionaron aquella noche.