Vivían en casas separadas en un terreno común, tras una relación conflictiva de 16 años. El se encerró en la suya cuando llegó la policía. Y hubo un incendio.

 

Sergio Nieto y Ester mantuvieron el martes por la noche la última discusión de una relación que ya se había fracturado tres años atrás. Residían en el mismo terreno pero en casas separadas. en Somoza al 3100, en Nuevo Alberdi sur. Ella en la casa de material en la que supo vivir la pareja. Y él en una construcción lindera de chapas. Ester tiene 65 años y Sergio 50. El contexto, por lo que relatan los vecinos en ambos frentes, era de una violencia normalizada.

El martes tras una severa discusión, Ester llamó a la policía y Sergio se encerró en su pieza de chapas, una situación repetida tras las separación. Pero esta vez Sergio cerró la puerta con candado y amenazó con prenderse fuego si aparecía la policía. Algo salió mal. Un colchón tomó fuego y en cuestión de pocos minutos la habitación ardió con él en su interior.

Sobre la muerte de Sergio Nieto hay al menos dos versiones. La oficial, en la que se indicó en que Nieto había agredido a su pareja tirándole una olla de comida caliente sobre el cuerpo. Y ante el tenor de la agresión, que el hombre había decidido quemar a lo bonzo. La extraoficial la deslizaron algunos vecinos. Estos contaron que si bien la ex pareja tenía agarradas intensas la agresión de Sergio hacia la mujer como un acto de intención femicida nunca existió.

"Sabemos que hubo una discusión, como casi siempre, en la que el hombre estaba cocinando. Que ante el hostigamiento de la mujer, Sergio agarró la olla y la dio vuelta en el suelo. Le dijo: «Yo estaba cocinando y de esta comida también ibas a comer vos». Y ella llamó a la policía. Pero él no le tiró comida o la olla a la mujer como dijeron en la radio", contó una persona allegada a la familia conocedora del diario vivir.

Hartazgo e intolerencia

La relación entre Ester y Sergio había comenzado hace 16 años cuando se conocieron. Ester tenía hijos de una pareja anterior que criaron juntos. Entre ellos no tuvieron hijos. Los vecinos contaron que Sergio trabajaba en una fábrica de cromados para maquinas industriales. La convivencia de la pareja se rompió hace aproximadamente tres años. Ahí decidieron seguir viviendo en el mismo perímetro pero en casas separadas. Ester y alguno de sus hijos en la de material. Sergio en una construcción de chapas. Las dos viviendas utilizan como lugares comunes el patio de tierra apisonada y los ingresos.

Según se pudo reconstruir el martes alrededor de las 21.30 por la noche Sergio cocinaba en su vivienda de Somoza esquina la cortada Pozos. De acuerdo al relato de vecinos Ester cruzó verbalmente a Sergio. Los vecinos reconocían que ese tipo de peleas eran normales y que algunas veces terminaban con Ester llamando a la subcomisaría 2ª, de Nuevo Alberdi, y Sergio preso por algunas horas.

El clima era de hartazgo, intolerancia y desasosiego. La última discusión según los vecinos dio ante, al menos, un testigo: un nieto de la mujer. La versión oficial indicó que Sergio le arrojó una olla comida caliente a Ester sobre su cuerpo. Siempre según este relato Ester estaba junto a dos muchachos de 19 y 15 años, domiciliados en la casa. Y ante el hecho consumado Sergio se encerró en su habitación y se prendió fuego a lo bonzo.

"Y así pasó"

Algunos vecinos relataron otra historia, no menos violenta. En la que Sergio incendió la casilla en la que residía. O en su intención de montar una puesta en escena para no caer otra vez preso y todo se le fue de las manos. "Vecinos problemáticos. La mujer tenía problemas con el ex marido y con todos los vecinos. Esto ya había pasado muchas veces, pero esta vez terminó mal. Parece que cuando llegó la policía el hombre se encerró en su pieza. Cerró la puerta de la habitación y tiró la llave. Les decía a los canas: «Si no se van me prendo fuego». Y le contestaban: Si tenés huevos prendete fuego. Y así pasó. No se sabe si se prendió fuego o en el medio de querer asustar, un colchón se encendió y no pudo salir porque estaba cerrado con llave. Lo encontraron hecho un bollito, calcinado, en un rinconcito del cuarto", explicó un vecino.

El fuego pasó rápidamente de la casilla de Sergio a la casa de Ester. Y de ahí a la de un vecino. Debieron actuar dotaciones de bomberos Zapadores y Voluntarios. Sergio, como su casa, quedó reducido a cenizas. El caso fue tomado por el fiscal Fernando Sosa, quien cerró el expediente como suicidio. No pudo constatarse oficialmente si existían denuncias por violencia de género contra Sergio Nieto.