Desde Estados Unidos presionaron al presidente venezolano para que abandone el poder en un "plazo inmediato". "No hemos sido lo suficientemente duros todavía", advirtieron.

 

El gobierno de Estados Unidos le comunicó al entorno del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que tiene un "corto plazo" para abandonar el poder si no quiere enfrentar a la Justicia internacional y nuevas medidas estadounidenses. En tanto, el Grupo de Lima envió un mensaje similar: "Si no toma esa decisión, las medidas se van a endurecer mucho más".

Mauricio Claver-Carone, asesor del jefe de la Casa Blanca, Donald Trump, advirtió que "el plazo es inmediato" y que ya lo han "comunicado indirectamente, con personas en quien él (Maduro) confía". En ese marco, aseguró que el plazo que dio Estados Unidos es "mucho más corto que antes de fin de año".

Sin embargo, al ser consultado acerca de si las consecuencias para el mandatario venezolano estarían en los tribunales de Estados Unidos, el funcionario habló, en cambio, de sanciones. "La consecuencia es que, como dijo el presidente (Trump), no hemos sido lo suficientemente duros todavía. Las sanciones seguirán incrementándose y serán mucho más duras de lo que son", advirtió.

Claver-Carone, que dirige la política hacia Latinoamérica en el Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, insistió en que lo que ofrece "no se trata de una negociación" sobre el futuro del chavismo. "Si él acepta y le interesan esas garantías para que pueda salir del país, siempre hemos dicho, desde el primer día, que el cómo, el cuándo y el dónde lo negociaríamos sin problema", concluyó.