Los agentes de la Guardia Urbana Municipal (GUM) se llevaron una enorme sorpresa al remover un vehículo mal estacionado.

Los agentes de la Guardia Urbana Municipal (GUM) se llevaron una enorme sorpresa cuando, al remover un vehículo mal estacionado, vieron que en el interior había un nene de aproximadamente dos años durmiendo. Tuvieron que activar un operativo con sirenas, balizas y silbatos para que apareciera el adulto responsable.

Finalmente el padre acudió al lugar argumentando que había dejado a su hijo en el auto porque debía pagar una cuota en una cancha de paddle.

Eran las 17 del jueves pasado, cuando la grúa, junto a agentes de la GUM, recorría la zona de Pasco y Dorrego. Al llegar a la ochava, los agentes se percataron de que un Chevrolet Corsa color gris estaba estacionado en forma indebida sobre la esquina.

Casi en forma mecánica, el personal se dispuso a enganchar el rodado en infracción, pero cuando ya se estaba por concretar el procedimiento, descubrió que en el interior del vehículo dormía el nene de unos dos años.

Después de la sorpresa, los agentes suspendieron el operativo. De inmediato se activó la búsqueda del adulto responsable. Minutos más tarde, luego de hacer sonar silbatos, sirenas y encender balizas, apareció un hombre que manifestó ser el padre de la criatura.

"Es un hecho poco frecuente. Estaba durmiendo con los vidrios cerrados, que afortunadamente no estaban polarizados, porque de ese modo los inspectores no lo hubiesen visto. Pudo haber ocurrido algo peor que llevar el auto al corralón con el niño adentro", apuntó la directora de la GUM, Fabiana Bergia.

Tras la aparición del padre, se hizo el control de la documentación personal y la del vehículo. Según algunos voceros que participaron del hecho, el papá argumentó que lo dejó durmiendo para bajarse a pagar la cuota de un club de paddle que está en la esquina.

Fueron momentos muy angustiantes para los agentes. Hasta se había evaluado llamar a la policía si el padre no aparecía. En el acta de infracción por mal estacionamiento se dejó asentada esta situación.

"Hubo escenas de indignación, además si cargábamos el auto con la criatura adentro, los padres nos habrían criticado", dijo un funcionario.

Una vez que se labró el acta correspondiente, los transeúntes felicitaron al personal municipal por la actuación.