Por iniciativa del intendente José Luis Freyre y su equipo de trabajo, encabezado por Pablo Rada, se invertirá el remanente de la venta de los caños de la frustrada ampliación del Gasoducto Regional Sur, que se estima en alrededor de 200 millones de pesos, para la construcción de cien viviendas municipales.
Este plan habitacional se enmarcaría bajo el modelo de sistema solidario, el cual se retroalimenta con el producido proveniente del pago de las cuotas, invirtiéndose en nuevas unidades (Fondo Municipal de Viviendas)
El intendente destacó que el proyecto abarca a distintos sectores, alcanzando a familias con necesidades sociales, madres solteras y cupos para personas con discapacidad. La intención es afectar a trabajadores incluidos en el mercado formal, pero también a aquellos que, a pesar de estar en la informalidad, puedan demostrar constancia en el pago de alquileres o servicios.
La propuesta tendrá en cuenta distintas categorías. Una alternativa incluirá a quienes puedan hacer una entrega parcial y el resto en cuotas; y otra será para financiar el pago totalmente en cuotas. Para la disposición de los terrenos la Municipalidad planea lotear reservas con que cuenta en diversas zonas de la ciudad.
Otro punto saliente del proyecto es que se apuntará a la construcción de viviendas sustentables, haciendo foco en la eficiencia energética.
Vale destacar que esta inversión tiene como marco una fuerte política habitacional de la administración de José Luis Freyre, que viene trabajando en forma permanente para reducir esta problemática en la ciudad. A modo de ejemplo, el Municipio ya entregó cerca de 600 terrenos al Estado provincial para la construcción de viviendas. El caso más reciente fueron los 64 lotes donados a la Provincia este año.