Una encuesta sobre prácticas y hábitos de consumo de sustancias problemáticas en barrios del oeste santafesino confirma una dura realidad. Para más del 85% de los encuestados, las drogas son un problema en su barrio. Casi el 80% afirma que el consumo de estas sustancias aumentó. Más del 50% dice que en su barrio venden y les resulta fácil comprarla. Casi el 40% contó que le ofrecieron al menos una vez en la vida, en los jóvenes este número asciende al 50%.
El trabajo fue realizado por la consultora local Canónika y presentado por el Centro Cultural y Deportivo "Ni un pibe menos por la droga". "Lamentablemente los datos científicos indican que lo que percibíamos de la realidad, tristemente es así. Tenemos una situación dramática desde el punto de vista del futuro de la sociedad que tiene que ver con los jóvenes y los niños", dijo Pablo Landó, coordinador del centro ubicado en Avenida Freyre 2421, donde en 2018 asistieron a 130 jóvenes con problemas de consumo, este año ya tienen 180 inscriptos.