Ya se analizó más de un tercio de estas propiedades. El nivel de deterioro de las estructuras es entre moderado y peligroso.

Alrededor de 150 propiedades ubicadas en el casco histórico de Rosario presentan riesgos edilicios de magnitudes considerables. Además, la Dirección de Obras Particulares del municipio instó a los rosarinos a pedir inspecciones. Esto para evitar desprendimientos y arreglar las estructuras a tiempo.

El encadenamiento de situaciones de caída de mampostería en diversos inmuebles generó preocupación. Fue en la zona donde se concentra la mayor afluencia de peatones.

Razones

"Hay desprendimientos o caída de aleros, cornisas, balcones o elementos de fachadas son, fundamentalmente, porque en el casco histórico las propiedades antiguas, junto a algunas que no son tan viejas. Las causas es que poseen una falta de mantenimiento y conservación notables. Los propietarios no prestan debida atención al tema y pasan estas cosas", explicó Carlos Hyon, ingeniero de Obras Particulares del municipio.

Por eso, Hyon remarcó en varias oportunidades la importancia de que los dueños de los inmuebles que tengan problemas en sus fachadas se acerquen a la repartición. Es para llevar a cabo un análisis y posterior informe de la situación.

El equipo de Obras Particulares, una vez realizado el informe, comenta a los propietarios qué es lo que tienen que hacer con las estructuras analizadas.

Así, llevan a cabo actuaciones preventivas en inmuebles que presenten algún tipo de riesgo. "Para que el frentista o el vecino tome conciencia de que hay que hacer algo. Por lo menos para realizar una revisión del asunto", dijo.

Relevamiento

De las 150 propiedades que la Guardia Urbana Municipal (GUM) relevó fotográficamente, en Obras Particulares avanzaron sobre más de un tercio de ellas. En las detecciones se observaron varias situaciones, que van de moderadas a muy riesgosas.

No obstante, también aclararon que pueden aparecer más casos en el casco histórico.

"Nosotros no podemos determinar el momento ni la magnitud de una caída de mampostería. Esas situaciones no te dan aviso. Por eso, los propietarios tienen que acercarse para que podamos inspeccionar las propiedades que necesiten arreglos. Y, de esta manera, adelantarnos a hechos que pueden terminar muy mal", recalcó Hyon.

Justamente, en los últimos días hubo que actuar de inmediato por un importante desprendimiento en un inmueble de Mitre al 1100, donde se ubicaba una panadería. Y no es la primera vez que se debe proceder luego de que pasen las cosas.

Desde el área afirman que la gente debe acercarse a exponer los casos de sus propiedades para que éstas sean inspeccionadas y conocer las eventuales obras a realizar.

Sin embargo, no dejan de lado la situación económica actual en el país, algo que es un impedimento primario a la hora de encarar refacciones de cualquier índole en un inmueble.

Denominador común

"Hay casos que con una revisión muy sencilla se solucionan; en el informe técnico que hacemos, les damos a los vecinos de la ciudad toda la documentación para que hagan las mejoras. El tema es que hay un denominador común, que son los problemas económicos de hoy en día y es lógico que la gente no tenga el dinero que se necesita para pagar los arreglos", expresó Hyon.

Por último, el ingeniero volvió a manifestar: "Queremos advertir a los propietarios que se acerquen, que pidan la inspección oficial de municipio para determinar el estado de las fachadas y evitar que pase una desgracia".