Su nombre no fue publicado para resguardar su privacidad, pero su padre, que la buscó casi 42 años, estuvo presente en la conferencia de prensa para confirmar la noticia.

La titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, confirmó este martes la aparición de la nieta número 129 que "podrá conocer a su padre", según anunció con el hombre, Carlos Alberto Solsona, sentado a su derecha.

Carlotto anunció la identificación de "una nueva nieta" hija de detenidos desaparecidos durante la última dictadura militar. "Las numeramos para darnos fuerzas con el número que va aumentando", expresó la titular de Abuelas.

La nieta 129 vive afuera de la Argentina, está casada y tiene dos hijos. Su caso llegó a los investigadores de Abuelas en 2012, cuando vieron su partida de nacimiento "firmada por un médico de la policía federal", como explicó Carlotto, en la que constaba "que el parto había sido en domicilio".

Se cree que la mujer nació en una de maternidad clandestina de Campo de Mayo, a donde habría estado secuestrada su madre, identificada como Norma Síntora.

El equipo de aproximación de Abuelas contactó a la mujer en 2013 pero la prueba de ADN se aplazó hasta que la Justicia argentina la citó a hacérselo. "No se la quiso hacer en ningún consulado. Vino a la Argentina. Tuvo voluntad, lo cual es un muy buen síntoma", expresó Carlotto.

Pablo o Soledad

Síntora estaba embarazada de ocho meses cuando fue secuestrada por miembros de las fuerzas armadas el 21 de mayo de 1977. La mujer se había refugiado en Moreno, provincia de Buenos Aires, en la casa de un matrimonioque fue llevado en el mismo episodio.

Tanto Síntora como su esposo estudiaban ingeniería electrónica en Córdoba y militaban en PRT - ERP. Para 1977 habían decidido dejar a su hijo mayor, Marcos, en manos de los padres de ella mientras evaluaban la posibilidad de exiliarse en España.

Síntora fue detenida y continúa desaparecida. Marcos, que tenía un año al momento del secuestro de su madre, fue criado por sus abuelos maternos y conoció a su padre cuando tenía 10.

El matrimonio había elegido dos posibilidades para nombrar a su segundo hijo: Pablo o Soledad. Casi 42 años más tarde, Solsona descubrió cuál era la opción correcta.

Solsona estuvo acompañado en la conferencia de prensa de Abuelas por su hermano José, por Marcos, y por Martín, el hijo que tuvo con su segunda mujer.