Así lo sostuvo el sacerdote Sergio Capocetti de San Javier que recientemente pidió un préstamo en redes sociales por no poder afrontar los gastos de limpieza y albañilería de la institución que administra.

"Queridos amigos/as: ¿Alguien puede prestar $5mil a la parroquia? Devuelvo en 15 días. No llego con las obligaciones". Ese fue el texto que trascendió en redes sociales, publicado por el párroco Sergio Capocetti del santuario San Francisco Javier, de San Javier. Para conocer más del caso Cadena Oh! dialogó con el cura en la mañana de este lunes.

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¿Se consiguió el dinero? "Sí, y hasta un poquito más y no prestado. No hay que devolverlo. Salió todo bien. Me sorprendió mucho lo que pasó alrededor de esto. Me vi asfixiado porque a la gente a la que había que pagarle: la persona que limpia, el albañil que hizo arreglos, son gente laburante. Había que responderle a ellos. Gracias a Dios fue una linda movida del árbol y cayeron frutos. Hay una persona de Santa Fe que va a hacer una colaboración. Pero también gente de acá se dio cuenta y vino a ayudar en su medida", respondió Capocetti.

Más adelante, desarrolló:"La gente por ahí piensa que la parroquia tiene mucha plata. Habrá parroquias que la tiene. Pero nuestra parroquia es una comunidad pobre, somos pobres también". ¿Tienen ingresos a futuro? "Es un mito que hay, que nosotros nos tenemos de algún ingreso del Estado o porque el Vaticano te manda. La forma en que todas las parroquias del mundo se sostienen es a partir de la colecta de la misa. Algunos salen a hacer un bingo o venta de pollos, empanadas, es para subsanar esas deficiencias. Así como el evangélico pone con su diezmo, nosotros la iglesia católica, nos sostenemos con la colecta de la misa", comentó el consultado.

Eso no da seguridad para gastos básicos como limpieza, trabajos que se hacen en la parroquia, que seguramente hay que pagar todos los meses. "Sí, y el seguro del auto y el servicio telefónico. El internet acá lo regalan gracias a Dios. Tenemos el regalo de Dios de que no pagamos la energía eléctrica por una ley que dice que todos los monumentos históricos provinciales no pagan la luz. Se vive de la providencia de Dios. Es una iglesia que depende del cielo, como debe ser", expresó el párroco.

Hay una intención del senador Baucero de colaborar a través del Programa de fortalecimiento institucional: "Sí, el senador responde cuando se le pide. No es que tengamos una cuota fija. Sino que responde como a la murga en carnaval y al club cuando necesita para el básquet. El senador colecta ese dinero para las instituciones empobrecidas del departamento San Javier y de otros departamentos también. Y es para un gasto puntual. El leyó y respondió en seguida. Estamos tratando de ver esa colaboración que él nos daría también", dijo Capocetti.

Los números

¿El sueldo de un párroco es de $12mil? "Así es. Así mandan a decir del arzobispado que el cura no puede cobrar más de $12mil. Ahora, cada parroquia ve si puede pagarles. Hay muchos curas que no reciben para nada ese dinero. Los curas de la costa tampoco tenemos ese sueldo, porque no alcanza. Pensemos que en nuestra parroquia desde enero del año pasado se está recolectando, por semana, unos $7mil. A mí el obispo me paga la jubilación y la obra social, porque sino no la podría pagar. Morir de hambre no me voy a morir, porque uno puede ir a una casa y  pedir que lo inviten a comer. O pedir en un quiosco que te anoten", dijo el cura.

Pero tendrían que cubrir los costos elementales... "Lo elemental está, pero a veces te supera cuando alguien viene a pedirte para un remedio. Pero está bueno que la iglesia sea pobre", respondió.

Pero no para todo el mundo la iglesia es pobre. "No. Para mucha gente está llena de plata y el Vaticano está lleno de oro", dijo Capocetti.

Pero es verdad que el Vaticano está lleno de oro. "Yo no vi tanto cuando pude ir, quizá está escondido", aseveró el cura.

A San Javier ese oro no llega. "No, y a Santa Fe tampoco. Solamente llegó cuando fue la gran inundación de Santa Fe que llegó una gran suma para Cáritas desde el Vaticano. Cada parroquia tiene que sustentarse".

Por último hizo un paralelismo: "Los franciscanos salían a mendigar a la calle, era otra época medieval. Pero hoy yo ocupé las redes, que es parte de las calles ya, para mendigar y que la gente reaccione y ayude".

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