“Resulta pueril pensar que habiendo ganado el dinero en actividad lícita en los países más controlados del mundo, va a venir a la Argentina a cometer un delito y a favorecer a un narcotraficante barrial”, dijo su abogado Néstor Oroño.

Carlos Delfino viajó a la Argentina a prestar declaración indagatoria por la presunta comisión del delito. De “lavado de activos de origen ilícito” ante el Juzgado Federal N° 2 del Dr. Francisco Miño. El santafesino de 36 años, ex NBA y uno de los jugadores destacados de la Generación Dorada que ganó los Juegos Olímpicos de Atenas en 2004, se puso a derecho este miércoles cuando a las 9.45 de la mañana se bajó de una camioneta BMW blanca y con vidrios polarizados para atravesar la puerta de los tribunales de calle 9 de Julio y Monseñor Zazpe. Allí lo aguardaba su abogado defensor, Néstor Oroño, quien una hora después explicó a los medios lo ocurrido durante la audiencia.

Leer más: Oroño: “Es impensable sostener que Delfino haya querido colaborar con este personaje”

Declaración

“Explicó su situación, en primer lugar negando haber querido colaborar con un delito ajeno. Menos aún haber querido cometer un delito él”, lanzó Oroño. “Lo explicó muy brevemente. Y mi trabajo va a ser acreditar con la documentación que Carlos Delfino hijo (su padre declaró la semana pasada) no era el propietario del inmueble. Sino que tenía ciertos derechos, porque en realidad el inmueble era titularidad de una sociedad radicada en Uruguay. Y así lo adquirieron de sus anteriores propietarios”.

Aclaró que “el esquema societario, que equivocadamente se les atribuye haber armado, es lícito. Y se armó por los anteriores propietarios”.

Leer más: El padre de Carlos Delfino declarará por lavado de activos