El Gobierno pretende reformar el reglamento de sorteo y adjudicación de demandas. Esto para cambiar a los jueces que reincorporaron a 354 despedidos en Télam.

Las cientos de fuentes de trabajo de la Agencia de noticias Télam, están nuevamente en peligro. Esto pese a que ya habían sido recuperadas a fines del año pasado. Así lo denuncian los delegados gremiales de la agencia. Y sus abogados del Sindicato de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (Sipreba). Advirtieron sobre las presiones de la gestión de Cambiemos sobre la Cámara Nacional del Trabajo. Esto para desplazar a los jueces que avalaron las reincorporaciones de trabajadores despedidos en junio pasado. Hoy habrá una marcha a la sede de la Cámara.

“Vemos muy clara la posibilidad de que la empresa quede habilitada nuevamente desde lo judicial. Esto para desvincular a los trabajadores”, expresó Mariano Suárez. Es delegado por Sipreba en la agencia pública de noticias. Lo dijo en relación con la situación procesal en la que se encuentra la batalla por la reincorporación de 354 trabajadores. Manifestaron que, “existe una interferencia ilegal e indebida de la Casa Rosada”. Es en la vía judicial que recorre el conflicto para lograr el ajuste “a todo costo”.

Denuncia

La denuncia de los trabajadores apunta lisa y llanamente a una “violación de la división de poderes” por parte del Ejecutivo. Luego de que los expedientes con los despidos de Télam llegaran a la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, el oficialismo inició una movida. Fue para cambiar el reglamento de sorteo y adjudicación de demandas en el tribunal. Lo hizo a través de Juan José Etala, uno de sus abogados. Y así quitarles de las manos los expedientes a los jueces que habían fallado a favor de los y las trabajadoras despedidos. “Lograron que se reformara todo el sistema de sorteo. Al solo efecto de alterar el circuito de los expedientes del conflicto en Télam”, contó Suárez.

Por ese motivo, los trabajadores y las trabajadoras de la agencia, se movilizarán esta mañana. Desde las 10, a la sede de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo. Allí habrá plenario de camaristas en el que prevén el tratamiento de este tema.

Lucha previa

El 26 de junio de 2018, la dirección de la Agencia, a cargo del director del Sistema de Medios Públicos, Hernán Lombardi, había despedido a 354 trabajadores. Casi la mitad de la planta. La decisión implicó la merma y, en algunos casos, la desaparición por completo de áreas y corresponsalías del medio público en diferentes partes del país.

Además de iniciar una huelga con permanencia en el lugar de trabajo que duró 119 días –la medida de fuerza más extensa en la historia del gremio de prensa– los trabajadores y las trabajadoras se organizaron para dar la batalla, también, a nivel judicial. El mes siguiente lograron el primer triunfo. El juzgado Nacional del Trabajo número 22, a cargo de Ricardo Tatarsky, consideró los despidos ilegales. Y ordenó la reincorporación de parte de los y las trabajadoras, aquellos comprendidos en una de las tantas medidas cautelares presentadas por el sindicato para tal fin.

Instancia judicial

Como cada medida no puede abarcar a más de 20 trabajadores. Los expedientes que nacieron fueron 10. Para octubre de 2018, la justicia de primera instancia había habilitado la reincorporación de todos los despedidos. Pero el camino judicial siguió porque el Gobierno nacional no cesó en su intención de ajustar. Las decisiones de primera instancia que aseguraron las fuentes de trabajo llegaron a la Cámara de Apelaciones del fuero laboral en donde también encontraron protección. El primer expediente recayó en la Sala V, con los jueces Enrique Arias Gisbert y Miguel Rodríguez Brunengo. Consideraron que antes de un despido masivo como el que intentaron aplicar en Télam, cualquier empresa debe presentar, el denominado Procedimiento Preventivo de Crisis. Como el Gobierno no lo hizo, debía reincorporar a las y los despedidos.

Hasta entonces y por reglamento, esa misma sala es la que debe intervenir en todos los expedientes así como lo hizo en el primero que trató. Sin embargo, la gestión oficial avanzó por varios frentes para impedirlo. Porque además de recusar sin éxito a los camaristas y denunciarlos ante el Consejo de la Magistratura, desplegó un “lobby extraordinario”. Esto hacia adentro de la Cámara. Incluyó la modificación del sistema de sorteo de causas para que cada expediente pueda ser evaluado por diferentes salas y la presión cuerpo a cuerpo en toda la Cámara.

En teoría, el conflicto queda fuera de la aplicación de esos cambios por haber llegado antes a la Sala V. Sin embargo, las presiones del Gobierno intentan que el nuevo reglamento se aplique con retroactividad. “Etala pasó despacho por despacho a visitar a cada camarista. Fue para explicarle que el cambio de postura en torno de Télam era un pedido expreso del Presidente”, apuntó el delegado de Télam. En su desfile, Etala saca chapa de amigo de Mauricio Macri. Entre sus antecedentes figura un paso por la comisión directiva de Boca y su formación básica en el colegio Cardenal Newman.