El titular de Smata advirtió que la situación en el sector automotriz, lejos de mejorar, seguirá empeorando y señaló que llegó el momento de adoptar medidas de fuerza con continuidad.

La fábrica de camiones Iveco confirmó este lunes la suspensión de 900 trabajadoresen su planta de la localidad cordobesa de Ferreyra que en marzo funcionará apenas 10 días. Además de las suspensiones la empresa de origen italiano anunció además la apertura de un plan de retiros voluntarios.

La crisis de Iveco se suma a la de otras empresas del sector automotriz que en los dos primeros meses de este año experimentó una caída del 22,1% de su producción en medio de la profunda recesión económica en la que derivó la política económica del gobierno de Mauricio Macri.

Frente a este cada vez más complicado panorama el titular de Smata, Ricardo Pignanelli, advirtió que "hace falta una medida de fuerza con continuidad, pero te tildan de golpista. Llevamos perdidos 90 mil afiliados y otros 5 mil están con licencia o jornada reducida".

Y siguió: "Después saltan los funcionarios diciendo que estamos en el mejor de los mundos".

Para Pignanelli lejos de mejorar, las perspectivas para el futuro inmediato son "de reducción de personal porque no tenemos mercado".

Crisis en el sector automotriz

La crisis es generalizada en el sector automotriz, al cierre de Metalpar se sumó la suspensión de 2 mil trabajadores en PSA Argentina (Peugeot-Citroën), 700 en Honda, 1.500 en Renault.

Por otro lado, Fiat Chrysler Automobile (FCA) suspendió 2 mil operarios el viernes pasado y volverá hacerle este viernes. A ese raid de suspensiones se sumó la aprobación del plan preventivo de crisis en la fábrica de neumáticos Fate, donde se esperan 430 despidos.