Los delincuentes ingresaron a un local comercial dedicado a la venta de baterías para autos.

Los malvivientes rompieron el blindex y sustrajeron una impresora y tres baterías.

Un vecino llamó al 911, alertando sobre la situación. Al arribar al lugar, personal policial entrevistó al hombre quien declaro que mientras pasaba por el lugar advirtió que dos paneles del blindex de la vidriera estaban rotos.