Era de Arocena y estaba internado en el hospital de Niños de Santa Fe. Había sido derivado por la gravedad de su estado de salud.

 

El nene vivía en la localidad santafesina de Arocena, y fue atacado por el arácnido. En primer lugar fue llevado por sus padres al Samco de Barrancas, donde le pusieron el antídoto. Luego, al estar estabilizado fue trasladado a Coronda.

Según Pablo Ledesma, médico del hospital de Niños, debido a un "agravamiento del estado general en la salud del nene, el sábado a la madrugada llegó a nuestro nosocomio porque necesitaba una atención de mayor complejidad".

Ledesma también confirmó el fallecimiento del bebé que "tenía un cuadro grave y severo que le produjo la muerte".

El peligro de las picaduras proviene del veneno que dejan cuando una persona toma contacto accidentalmente con uno de ellos y que, en los casos más extremos, puede ser de suma gravedad.