Miedo, recesión, precaución, oportunidad, inflación o fondos indexados son palabras que se ven en todos los artículos que economía que se están publicando estos días hablando sobre las previsiones para el próximo año.
Ahora bien, donde no todos se ponen de acuerdo es en los mejores sectores en los que invertir (y de cuales mejor estar alejado). La prensa generalista y la especializada tiene dudas, no obstante, hay algunos que son los claros favoritos, y ya pueden ir muy mal las cosas para que les vaya mal. De todos ellos se hablará a continuación.
Sectores más prometedores
Entretenimiento
Sin duda alguna el Coronavirus cambió los hábitos de los consumidores, cada vez se pasa más tiempo en casa, tanto teletrabajando como disfrutando del ocio. Invertir en empresas fuertes de este sector es una estrategia que siguen muchos inversores que piensan que esta tendencia crecerá en el 2023. Un año en el que el primer semestre viene marcado por una gran inflación que los bancos centrales quieren disminuir, pero que, de momento, no han conseguido, el aumento de los precios hará que previsiblemente mucha gente siga consumiendo ocio en casa.
Dentro del sector, gigantes como Disney no dejan de crecer y hay tendencias muy marcadas que van a continuar previsiblemente el año que viene, entre ellas la evolución de las redes sociales, la dicotomía de presencialidad- hogar y el streaming que sigue ganando adeptos.
Energía
La guerra entre Ucrania y Rusia ha dejado patente los problemas de suministro en Europa y ha revalorizado su importancia. La electricidad, el petróleo crudo, el carbón o el gas natural forman parte de este apartado. Si algo queda claro es que en el 2022 no han visto los números rojos, y la tendencia es que durante los próximos meses siga siendo así.
En relación a las empresas que lideran este sector, hay desde danesas, españolas o de Oriente Medio.
Servicios financieros
Aquí se encuentran los servicios que tienen que ver con el dinero. Estos son ofrecidos por distintas entidades. Cada una de estas empresas no suele ser exclusiva, es decir, que ofrece distintas cosas desde pagos, transferencias, préstamos o gestión de patrimonio.
En cuanto a quién está interesado en ellas, hay desde pequeñas, medianas y grandes empresas, hasta gobiernos y particulares. Tener una cartera diversificada es cada vez una realidad más cercana para miles de inversores por lo que este tipo de servicios se tienden a solicitar más.
El retail
El comercio minorista viene fuerte y se prevé que siga siendo así en el futuro cercano. Las innovaciones digitales están transformándolo, muchos pequeños comercios aprovecharon la pandemia para “ponerse al día” y muchos gobiernos ofrecen el kit digital mediante el cual financian parte de este cambio.
La Covid 19 afectó mucho a este sector, quien salió indemne de él lo hizo mucho más fuerte. Hoy en día la competencia ha conseguido mejorar mucho este sector y ponerlo al día con las últimas tendencias y variaciones del mercado.
El cambio de residencia de muchas personas debido a la pandemia, a lugares más pequeños, les ha acercado al pequeño comercio.
Suministros
Si bien a los inversores les preocupa cuánto ganarán, también les preocupa mucho el riesgo y la volatilidad de sus productos. La volatilidad está ahí y sin duda, no hay que obviarla porque va a seguir mucho tiempo más. No obstante, los suministros (de agua, de gas natural o de electricidad) tienen una volatilidad no tan alta, siendo esto lo que les hace tan atractivos.
Todos aquellos inversores que prioricen la seguridad no hace falta que se vayan muy lejos, ya que aquí pueden encontrar su nicho perfecto.
Conclusión
Estos son algunos de los sectores que previsiblemente serán más boyantes durante el próximo año. De todas maneras, siempre pueden aparecer sorpresas de última hora en otros sectores, por lo que es importante estar pendiente de cualquier novedad.