A sala llena se inauguró la Muestra "Carlos Páez Vilaró. El pintor del medio del río", en el Museo Municipal de Artes "Julio Pagano" de Reconquista. La cálida apertura, cargada de recuerdos, emociones, música y mucho arte del reconocido pintor y escultor uruguayo, estuvo colmada de público que se dio cita en la noche del viernes 17 de febrero, en la histórica esquina de Patricio Diez y Gral. Obligado.
En ese marco, el Intendente de Reconquista, Dr. Amadeo Enri Vallejos, agradeció la presencia destacada de Florencio Páez, curador de la Muestra e hijo del artista uruguayo, dándole la bienvenida a la ciudad y obsequiándole el libro de "La vida de Reconquista en sus Instituciones”.
Por su parte, el responsable del Museo, Osvaldo Coulchinsky, destacó el amor e ilusión con el que trabajó el equipo de la Secretaría Cultura y del Museo para contar con las obras de Carlos Páez Vilaró en la ciudad y que pueda ser visitada por todos.
Señaló que "somos el segundo Museo en la provincia de Santa Fe que recibe estas impactantes obras, con todo lo que significan por su calidad", remarcando el nivel e impronta artístico de Páez Vilaró.
En tanto, el secretario de Cultura y Deportes del Municipio, Lic. Lucas Ferro, agradeció el apoyo y acompañamiento del Intendente Enri Vallejos, como así también el compromiso con el arte de Osvaldo Coulchinsky, haciendo hincapié en la interesante vida y obras del artista.
Por último, Florencio Páez, habló que la riqueza cultural de su padre, plasmada en primera persona, en un audiovisual donde cuenta su carrera artística, sus viajes y el proceso de construcción de Casapueblo.
"Estoy encantado con la ciudad de Reconquista, es muy linda", subrayó e invitó a los presentes a compartir juntos el audiovisual de "Arte y Aventura" y luego a disfrutar de la Muestra y lo que transmiten las creaciones de su padre.
La exitosa velada se extendió hasta la medianoche, amenizada musicalmente por el mismo Florencio Páez, entre charlas, anécdotas y las coloridas pinturas de Carlos Páez Viraló.
Visitá la Muestra
En la imponente muestra se exhiben obras en su mayoría en técnica acrílico sobre tela, de portes que varían de los 30 x 40 centímetros hasta los 2 x 2 metros, realizadas en su atelier de Tigre, Buenos Aires, con temáticas muy recurrentes como: Puertos, bares, candombes, figuras africanas, simbolismos, grafismos, la vida porteña, la música y el folclore.
La muestra "El hombre del medio del río" está abierta al público hasta el domingo 2 de abril de 2023, de lunes a viernes de 08:00 a 12:00 y de 14:00 a 20:00 hs; sábado y domingo de 17:30 a 20:30 hs, con entrada gratuita.
Como activaciones, habrá talleres para niños y adolescentes y se podrán hacer visitas grupales guiadas solicitando turnos en el Museo Municipal de Arte "Julio Pagano".
Biografía
Carlos Páez Vilaró nació en Montevideo, Uruguay, el 1 de noviembre de 1923. Debido a su fuerte vocación artística se fue en su juventud a Buenos Aires, donde se vinculó al medio de las artes gráficas, como aprendiz de cajista de imprenta en Barracas y Avellaneda. Regresó a Uruguay, en la década del 40, motivado por el tema del candombe y la comparsa afro-oriental y se vinculó estrechamente a la vida del conventillo “Mediomundo”, entra de lleno a manifestarse en el campo del arte.
Páez Vilaró se entregó totalmente al tema, pintó decenas de cartones, compuso candombes para las comparsas lubolas, dirigió sus coros, decoró sus tambores o incentivó un folklore que en ese momento luchaba por imponerse contra la incomprensión.
Conoció a Picasso, Dalí, De Chirico y Calder en sus talleres y vivió con el Dr. Albert Schweitzer en el leprosario de Lambaréné. Páez Vilaró, integrando la Expedición Francesa “Dahlia”, consiguió realizar en África, el film “”Batouk. En su vasta trayectoria de realizaciones y a pesar de los viajes y los cambios experimentados en su pintura durante el medio siglo de acción, el artista conservó con solidez su lealtad al tema afro-uruguayo. El conventillo “Mediomundo”, punto de arranque de su obra, fue demolido y con él, su riquísimo historial. Páez Vilaró, radicado finalmente en Punta Ballena, Uruguay, tuvo su taller en la cúpula mayor de Casapueblo, su “escultura habitable”, modelada con sus propias manos, sobre los acantilados que miran al mar en Punta Ballena.
Falleció en Casapueblo, el 24 de febrero de 2014. Fue despedido con honores de Estado en Uruguay.
