Gustavo Petro se convirtió este domingo en el primer presidente de izquierda de Colombia, un país históricamente dominado por conservadores y liberales, que prometió gobernar con un “gran acuerdo nacional para construir los máximos consensos” en torno a las ambiciosas reformas que propuso en la campaña.
A sus 62 años, este economista que integró la guerrilla, fue alcalde de Bogotá y tuvo varios períodos en el Congreso logró entrar en la historia colombiana al obtener en junio pasado 50,4% de los votos en su tercer intento por llegar a la Casa de Nariño.
El resultado llegó sobre la base del denominado Pacto Histórico, una amplia alianza que reúne a fuerzas de izquierda, feministas, ambientalistas, juveniles y sindicales, todas en torno de Colombia Humana, el partido que él mismo fundó.
Antes de esta victoria, Petro pasó por la alcaldía de Bogotá y por el Congreso. En los dos puestos su tarea fue ruidosa.